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Revolviendo el té: diferencias entre tés negros, verdes y herbales
Aprende a preparar correctamente el mejor té vespertino.
Publicado Diciembre 19, 2021
Yker Valerio
Expertos en café@The Coffee Lab
Earl Grey, English Breakfast, manzanilla, no te equivoques: aunque el tiempo de almacenamiento del té puede casi triplicar el del café, puede ser tan complejo como prepararlo. Para nosotros los amantes del café que hemos dedicado nuestro tiempo a perfeccionar las formas del café, puede ser un poco intimidante entrar en el mundo del té.
Ya sea que desees profundizar en todo lo relacionado con el té o aprender los conceptos básicos para preparar una buena infusión, aquí hay algunos consejos sobre los tipos de tés que existen.
Té negro
Gran parte de Asia tiene una tradición de disfrute del té con más de 5.000 años de antigüedad. China es la primera región que lo descubrió, utilizando las hojas de la planta del té Camellia sinesis. Para procesar el té negro, los cultivadores arrancan las hojas de estas plantas y las dejan oxidar durante un período de tiempo específico. Esto significa que las hojas se dejan secar; algunos pueden comparar esto con la forma en que las semillas de las cerezas de café permanecen secándose al sol.
Las hojas de té negro suelen ser las más largas en comparación con otras variedades. Durante el proceso de oxidación, cambia el color de las hojas, desarrollando tonalidades más profundas y cambiando los perfiles de sabor. Estas hojas terminan con notas maltosas, ahumadas y, a veces, incluso afrutadas. La fecha de cosecha, el tamaño de la hoja y el tiempo de oxidación son factores cruciales para diferenciar los tés.
Tipos de té negro
Aunque el té negro es común en China, muchos países del mundo han cultivado y popularizado sus propios estilos de té negro. Hay innumerables variedades para explorar, pero aquí hay algunas comunes que puedes encontrar en un menú de té en una cafetería o restaurante.
Assam: Originario de la región de Assam en la India, este té es un té negro malteado clásico con muchos taninos y polifenoles (compuestos vegetales) que le dan un cuerpo pesado. Gracias a estas notas, también puedes esperar un final cremoso y suave en tu taza.
Darjeeling: este té también proviene de Darjeeling, India. Estos tés increíblemente fragantes tienen notas almizcladas de sabor dulce, con delicadas notas frutales y cítricas. Muchos describen este estilo como el "champán de los tés", y los fabricantes de té a menudo lo incorporan a las mezclas de té.
Earl Grey: muchos notarán fuertes aromas y sabores de lavanda al beber este tipo de té. Earl Grey es en realidad té Darjeeling o Assam con aceite de bergamota. Sin embargo, puedes seguir confiando en tus papilas gustativas, porque Earl Grey se combina experimentalmente con otras adiciones florales como rosa, vainilla e hibisco. Este té también es popular para hornear y tomar té con leche debido a su aroma acre.
English breakfast: similar o igual a las variedades irlandesas y escocesas, estos estilos son todas combinaciones diferentes de Assam, Ceilán, Darjeeling y otros tés negros. Cada uno mezcla intencionalmente un determinado componente de otro para producir cierta consistencia. Sin embargo, el inglés es el más suave de los tres. Es una mezcla de los rasgos más deseables de las otras variedades: con sabores claros y limpios, el cuerpo pesado adecuado y una dulzura perfecta, las mezclas de desayuno son perfectas con leche y azúcar.
Cómo preparar té negro
Hierve agua a 100 grados centígrados. A diferencia de otros tés, el negro se puede disfrutar a temperatura de ebullición.
Si no usas una bolsa y trabajas con hojas sueltas, intenta consumir 2-3 gramos de hojas por cada 180 ml de agua. Si tienes un infusor de té, es mejor aún y si no, es bastante fácil de encontrar en línea .
Sumerje la bolsa o el infusor de té en agua durante 5 minutos con un temporizador. Una vez que el temporizador marque el tiempo, retira el infusor inmediatamente y ¡disfruta!
Té verde
Lo creas o no, el té verde y el té negro son lo mismo, en cierto modo. Ambos derivan de la planta Camellia sinesis , pero experimentan diferentes tiempos de oxidación. Es decir, que el té verde no se oxida en absoluto, por lo que sigue siendo literalmente tan verde como es. Por esta razón, el té verde tiene la mayor cantidad de ANTIOXIDANTES o propiedades químicas que son excelentes por razones de salud.
El té verde se procesa de manera un poco diferente al té negro, que se seca y se oxida. Las hojas de té verde se arrancan y luego se calientan rápidamente al freírlas en sartén o al vapor para evitar cualquier oxidación. Esto da como resultado un color verde, amarillo o marrón claro. El té verde proviene originalmente de Yunnan, China, pero Japón lo popularizó en 1190, cuando un monje que estudiaba en China lo trajo a su país.
Tipos de té verde
Tanto China como Japón producen asombrosos tés verdes. Sin embargo, muchos tés japoneses están en los menús de las cafeterías y los restaurantes. Por lo general, varían según la forma en que los fabricantes de té les aplican calor, ya sea al vapor o tostándolos.
Sencha: Sin duda, Sencha es la variedad más común que disfruta Japón. El procesamiento es laborioso. Una vez que las hojas de té se cosechan al arrancarlas, los teteros las cocinarán al vapor y luego las enrollarán en hebras individuales. Muchos describirán el sabor de Sencha como ligeramente vegetal, con matices herbáceos y de algas marinas.
Hojicha: Hojicha es también una versión transformada de Sencha. En lugar de someterse al vapor, las hojas de té enrolladas de Hojicha experimentan un tostado a fuego alto. Como resultado, esto reduce el contenido de cafeína del té. También tiene, por supuesto, un sabor tostado y a nuez. Genmaicha, otro té común, es otro transformado de Hojicha, ya que la única diferencia es que se le agrega arroz inflado tostado, lo que resulta en un sabor más intenso a frutos secos.
Matcha: Las cafeterías pueden estar más familiarizadas con el matcha, ya que muchas personas gustan de un latte matcha para salvar el día. En lugar de darle forma y enrollarlo, los fabricantes de té muelen hojas de matcha hasta convertirlas en polvo. Estas hojas también suelen crecer a la sombra. Muchos describirán el matcha como un sabor a hierba, con notas de dulzura y umami. También es popular para hornear y tomar con leche.
Cómo preparar té verde: El té verde es un poco más delicado de manejar que el té negro.
Calienta agua a 85 grados centígrados. Usa 2 gramos de té por cada 180 ml de agua.
Coloca la bolsita de té o el infusor de té en agua y déjalo reposar durante 3 minutos. Retira inmediatamente y sirve.
Té de hierbas
Mucha gente se sorprenderá al saber que el té de hierbas en realidad no es té en absoluto. No se deriva de la planta Camellia sinesis como lo hacen el té negro y verde. Más bien, es una combinación de flores secas, frutas, especias y hierbas. Por esta razón, la gente se refiere a los tés de hierbas como tisanas o infusiones de hierbas.
Dado que están elaborados con ingredientes naturales, no contienen cafeína. La gente los beberá por su sabor, para hacer una pausa después de un largo día o por motivos de salud.
Para hacer té de hierbas, simplemente toma el conjunto de hierbas que desees y sécalas. Puedes hacer esto con un deshidratador, tu horno o al aire libre según el clima.
Tipos populares de té de hierbas
Los tés de hierbas tienen mucha más versatilidad que el té negro y verde. Sin embargo, hay algunos más queridos que otros y que son populares en las cafeterías.
Menta: este té proviene de la variedad de plantas de menta. Por supuesto, es mentolado y de color verde claro. El cuerpo también es muy ligero con este estilo de té. Al igual que el jengibre, muchos afirman que este té ayudará con la digestión, especialmente después de una comida copiosa. También refresca el aliento, alivia los dolores de cabeza y mejora el sueño.
Manzanilla: este té se deriva de las flores de manzanilla, que se parecen a las margaritas. La manzanilla tiene flavonoides, un tipo de nutriente que tienen muchas plantas y que es esencial para el bienestar. La gente afirma que este té ayuda con la relajación, los dolores menstruales y la reducción de la inflamación.
Rooibus: Rooibus se origina en África, específicamente las hojas del rooibus o planta de arbusto rojo. Rooibus es en realidad el cierre de la producción regular de té. Esto se debe a que los fabricantes de té tienen que arrancar, magullar y fermentar las hojas; tienen que realizar un procesamiento similar, pero en lugar de oxidación, es fermentación. Como resultado, estos tés son extremadamente aromáticos, con notas de vainilla y jazmín. Rooibus también puede reducir la inflamación, controlar la diabetes y controlar la presión arterial.
Cómo preparar té de hierbas: Los tés de hierbas no tienen la capacidad de volverse astringentes tan fácilmente como los tés verdes y negros. Por esta razón, no hay mucho trabajo para prepararlos.
Hierva agua a 100 grados centígrados. Luego, deja reposar el té de hierbas que desees durante 7 a 10 minutos. No tienes que preocuparte por la sobreextracción. Puedes dejar reposar el té en la taza todo el tiempo que desees e incluso reusar las hierbas 1 a 3 veces. Sin embargo, ten en cuenta que el segundo o tercer servicio probablemente no será tan sabroso como el primero.
Esperamos que hayas aprendido a elegir el té más apropiado para cada momento y que hayas aprendido un poco más sobre el cuidado que se pone en procesar el té como el café.
Acerca del autor
Yker Valerio
Yker Valerio (he/him) is a freelance content creator. After more than 10 years of working as a management consultant, he started his blog Bon Vivant Caffè to share his passion for specialty coffee.
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